Enfrentando momentos difíciles en familia
Debido al teletrabajo y las clases virtuales, las familias han tenido que compartir más tiempo juntas en casa, viviendo situaciones nuevas y desconocidas.
La prolongación de la pandemia está provocando, a nivel personal y familiar, mucha incertidumbre, inseguridad y ansiedad al no saber cuánto tiempo más durará, qué nuevas medidas se establecerán, etc. Esta situación la estamos viviendo todos y todas, sin embargo se puede observar que hay personas y familias que se encuentran más “equipadas” que otras para enfrentar momentos de crisis, como los de ahora.
Fundación CAP, a través de su Programa Aprender en Familia (PAF), fortalece y promueve herramientas para que las familias trabajen y puedan estar preparadas para enfrentar de mejor forma, situaciones difíciles.Esto no se da espontáneamente, es un desafío de todos los días, para ir construyendo los cimientos que permitan hacerlo, cuando se necesite.
Las familias que ponen en práctica estos recursos se hacen más fuertes frente a las dificultades, ya que desarrollan una importante capacidad llamada resiliencia. Esta se refiere a poder enfrentar las crisis, superarla e incluso salir fortalecidos, aumentando así el sentido de identidad y pertenencia familiar.
Existen muchas maneras de desarrollar y fortalecer la resiliencia en estos momentos de crisis:
Comunicación: Desarrollar la comunicación entre los miembros de la familia, conversar con franqueza y apertura de lo que está pasando, escuchándose y permitiendo que cada uno exprese lo que siente.
Apoyo mutuo: Fomentar y resaltar la importancia de brindarse apoyo entre todos, destacando la confianza en la capacidad de la familia de enfrentar dificultades y de pedir apoyo, desarrollando una red social fuerte.
Flexibilidad: Capacidad de adaptarse a los cambios y situaciones imprevistas que se están presentando, como por ejemplo estar en cuarentena todos juntos, confiando en la posibilidad de probar y encontrar distintas formas de enfrentarlo.
Optimismo: Promover y transmitir una visión esperanzadora frente a la emergencia sanitaria que estamos viviendo. No significa minimizar lo que está ocurriendo, sino tener la convicción de que juntos, como país y familia podremos salir adelante.
Buscar soluciones en conjunto: Todos y todas, independiente de la edad, pueden opinar aportando ideas y diferentes miradas para enfrentar lo que están viviendo, por ejemplo, cómo entretenerse en la cuarentena, cómo respetar los espacios de cada uno, cómo mantener las rutinas en este contexto, etc.
Confianza: Creer que siempre se va a poder salir adelante y tener claro que se necesita esfuerzo, energía y solidaridad para apoyarnos y superar esta pandemia que está poniendo a prueba a todas las personas de nuestro país y del mundo.
En este periodo en casa, es muy importante generar espacios de autocuidado para cada uno de los miembros de la familia, de acuerdo a sus edades y necesidades. Si las y los adultos están bien, podrán dar seguridad, confianza y cuidado a los niños y niñas, empatizando con las emociones que están sintiendo, sus pensamientos e intereses propios.